Los derechos de autor, como un instrumento legal, “nacieron” en el siglo XVIII, cuando la Reina Ana Estuardo impulsó en el parlamento la Ley de Derechos de Autor de 1710, también conocida como la Ley de la Imprenta de Ana, que estableció los primeros derechos de autor modernos al otorgar a los creadores el derecho exclusivo a publicar y vender sus obras por un período de 14 años.
Esto nació de la necesidad de proteger la propiedad intelectual de escritores, artistas e inventores que, para ese momento (el llamado Renacimiento), impulsados por la masificación de la imprenta y la proliferación de los primeros modelos de casas editoriales, empezaron a necesitar controlar cómo se reproducían sus obras, especialmente aquellas destinadas a distribuirse internacionalmente.
Si bien el concepto de derechos de autor o la idea de que la propiedad intelectual de los creadores debía ser protegida se concebió en la antigüedad, no fue hasta 1710 que se materializó la primera normativa al respecto.
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Actualmente no existe una ley internacional de derechos de autor, ya que las normativas de derechos de autor varían de un país a otro, aunque sí existen estándares mínimos que han sido recogidos en el Convenio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas, así como el Acuerdo de Derechos de Autor de la Organización Mundial del Comercio.
El Convenio de Berna establece que los derechos de los autores serán exclusivos durante su vida y los 50 años posteriores a su muerte, aunque cada país ha establecido plazos más largos, como México, que establece 100 años; Venezuela, que establece 60 años; Colombia, que establece 80, y España, que establece 70.
Ya que tener acceso a obras universales puede impulsar la creación de obras derivadas y nuevas versiones, anualmente se le da especial seguimiento a los listados de obras que pasan al dominio público y, si bien la atención la ha capitalizado Mickey Mouse (más específicamente su versión de Steamboat Willie), ya que este año se extinguen sus derechos de autor, esta no es la única creación que entró a dominio público. Aquí una lista de algunas otras:
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En literatura
- Peter Pan (de J. M. Barrie).
- El misterio del tren azul (Agatha Christie).
- El amante de Lady Chatterley (D.H. Lawrence).
- Orlando (Virginia Woolf).
- Tarzan (Edgar Rice Borroughs).
- Romancero Gitano (Federico García Lorca).
- Princesa oscura (de W.E.B. Du Bois), obra perteneciente al llamado Renacimiento de Harlem.
A estas se suman todas las obras de los españoles Carlos Arniches (autor costumbrista), Alfonso Nadal (traductor), Francisco Rodríguez Marín (periodista y abogado) y Antonio Zozaya (traductor y periodista), entre varios más.
En cine
- El circo (Charlie Chaplin).
- El hombre que ríe (Paul Leni).
- El camarógrafo (Edward Sedgwick y Buster Keaton).
- Luces de Nueva York (Murray Roth y Hugh Herbet).
- El viento (Victor Sjöström).
- Oswald the Lucky Rabbit (Walt Disney y Ub Iwerks).
En artes gráficas
- La xilografía La Torre de Babel (M.C. Escher).
- Las obras de Rudolf Bauer (pintor alemán).
- El óleo La máscara vacía, del surrealista René Magritte.
- El libro de fotografías Urformen der Kunst (Karl Blossfeldt).
- Las obras de Pablo Picasso (en países con un plazo de 50 años).
- Las obras del dadaísta Francis Picabia.
- Las obras de Henri Matisse.
- Las obras de Edmund Dulac.
En música
- Las obras del guitarrista y compositor francés Django (en países con un plazo de 70 años).
- Las obras del cantautor estadounidense Hank Williams (en países con un plazo de 70 años).
- Animal crackers (hermanos Marx).
- Blues de la cama vacía (J. C. Johnson).
- Bambalina (Ray Miller Orchestra).
- Let’s Do It (Let’s Fall In Love), de Cole Porter.
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