Fecha de publicación: 17/03/2016
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A poco más de un mes de conocerse que Berwin Leighton Paisner LLP (BLP) y Greenberg Traurig LLP estaban en conversaciones para fusionarse, ambas firmas anunciaron que no continuarán con las negociaciones.
Sobre el asunto, Lisa Mayhew, socia directora de BLP, indicó que no existía una razón específica para tal decisión, sino más bien que obedecía al hecho de no haber encontrado puntos comunes para la fusión. También comentó que esta fue una oportunidad de negocio interesante.
Por su parte, el socio director de Greenberg Traurig, Richard Rosenbaum, dijo que a pesar de que la firma no había participado antes en una fusión porque defiende una posición conservadora ante el riesgo financiero, debía admitir que siente cierto pesar por la cancelación de la negociación. Asimismo, declaró que tiene gran respeto por BLP, con quien construyeron una sólida relación durante las últimas semanas.
Hace un mes, ambas firmas decidieron comenzar las negociaciones para lograr un acuerdo de fusión, con la meta de lograr una alianza para consolidar la presencia de ambas en Estados Unidos, de la cual BLP saldría más beneficiada, al sumar a su red 29 oficinas en este país. Asimismo, la firma británica hubiese sumado oficinas en Ciudad de México, con lo que hubiese consolidado presencia física en América Latina, además de en Israel, donde Greenberg Traurig también tiene una sede.
Entre los objetivos de esta fusión también estaba el aumentar el radio de acción de las prácticas de ambas firmas en las áreas de bienes raíces e infraestructura y derecho corporativo, financiero, regulatorio y fusiones y adquisiciones, entre otras.
De haberse concretado la fusión, hubiesen creado una firma con más de 2.500 abogados en la red internacional (de los cuales al menos 850 hubiesen provenido de BLP), oficinas en casi todos los continentes e ingresos superiores al millardo de libras.
Por ahora, todo queda como fue: BLP sigue con sus oficinas en Beijing, Hong Kong, Indonesia, Myanmar, Singapur, Bruselas, Francia, Alemania, Israel, Rusia, Reino Unido, África (a través de una práctica para el continente, liderada por Segun Osuntokun), Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos.
Entretanto, Greenberg Traurig seguirá con sus oficinas en casi una treintena de ciudades en Estados Unidos, entre las que se cuentan Austin, Boston, Chicago, Dallas, Miami, New York, San Francisco, Silicon Valley y Washington, D.C., entre otras. Así como en Ciudad de México, Seúl, Shanghai, Tokio, Ámsterdam, Berlín, Londres, Varsovia y Tel Aviv.
Sobre el asunto, Lisa Mayhew, socia directora de BLP, indicó que no existía una razón específica para tal decisión, sino más bien que obedecía al hecho de no haber encontrado puntos comunes para la fusión. También comentó que esta fue una oportunidad de negocio interesante.
Por su parte, el socio director de Greenberg Traurig, Richard Rosenbaum, dijo que a pesar de que la firma no había participado antes en una fusión porque defiende una posición conservadora ante el riesgo financiero, debía admitir que siente cierto pesar por la cancelación de la negociación. Asimismo, declaró que tiene gran respeto por BLP, con quien construyeron una sólida relación durante las últimas semanas.
Hace un mes, ambas firmas decidieron comenzar las negociaciones para lograr un acuerdo de fusión, con la meta de lograr una alianza para consolidar la presencia de ambas en Estados Unidos, de la cual BLP saldría más beneficiada, al sumar a su red 29 oficinas en este país. Asimismo, la firma británica hubiese sumado oficinas en Ciudad de México, con lo que hubiese consolidado presencia física en América Latina, además de en Israel, donde Greenberg Traurig también tiene una sede.
Entre los objetivos de esta fusión también estaba el aumentar el radio de acción de las prácticas de ambas firmas en las áreas de bienes raíces e infraestructura y derecho corporativo, financiero, regulatorio y fusiones y adquisiciones, entre otras.
De haberse concretado la fusión, hubiesen creado una firma con más de 2.500 abogados en la red internacional (de los cuales al menos 850 hubiesen provenido de BLP), oficinas en casi todos los continentes e ingresos superiores al millardo de libras.
Por ahora, todo queda como fue: BLP sigue con sus oficinas en Beijing, Hong Kong, Indonesia, Myanmar, Singapur, Bruselas, Francia, Alemania, Israel, Rusia, Reino Unido, África (a través de una práctica para el continente, liderada por Segun Osuntokun), Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos.
Entretanto, Greenberg Traurig seguirá con sus oficinas en casi una treintena de ciudades en Estados Unidos, entre las que se cuentan Austin, Boston, Chicago, Dallas, Miami, New York, San Francisco, Silicon Valley y Washington, D.C., entre otras. Así como en Ciudad de México, Seúl, Shanghai, Tokio, Ámsterdam, Berlín, Londres, Varsovia y Tel Aviv.
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