El equipo boliviano de FERRERE anunció la pasada semana que estrenaría nuevas oficinas al mudarse al piso 18 del Ambassador Business Center, de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra. Este centro arquitectónico incorpora tecnología de última generación.
La firma tiene en el país andino más de diez años de presencia. En esta nación abrió una oficina en Cochabamba en 2016 y luego en La Paz, desde donde, junto con el equipo de Santa Cruz, atienden empresas bolivianas y extranjeras en asuntos tributarios, laborales y comerciales.
Sobre esta nueva sede, el socio director de FERRERE Bolivia, Gerardo Villagómez, indicó que “es un paso más en el proceso de crecimiento de la firma en la región y particularmente en Bolivia”. Para el abogado, “esta noticia es un impulso para continuar en el camino de atraer talento e invertir en tecnología” para mejorar sus servicios legales.
FERRERE tiene en total 10 oficinas repartidas entre Bolivia, Ecuador, Paraguay y Uruguay, países en los que opera.
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