Luis Diez Canseco responde el Cuestionario LexLatin

Luis Diez Canseco Núñez

Luis Diez Canseco Núñez se retiró de Muñiz, Ramírez, Pérez-Taiman & Olaya y, junto a su equipo, y decidió abrir una nueva boutique: Díez Canseco Abogados. Con treinta años de ejercicio profesional, luego de cumplir con cargos de alto perfil nacional e internacional, asegura sentirse honrado en la compañía de sus jóvenes socios.

Aquí todas sus respuestas al Cuestionario LexLatin.

¿Qué le llevó a escoger el camino de la abogacía?

Inicié mis estudios debido a la tradición familiar y la profunda admiración por mi abuelo que había sido Juez de la Corte Suprema. En parte hice lo que había hecho mi familia por casi 500 años. Para ser honesto, estudiaba Derecho sin mayor entusiasmo e, incluso, estuve a punto de abandonar la carrera. En efecto, me matriculé en la Facultad de Historia en las que mis calificaciones eran muy buenas.

Sin embargo, en 1980 cuando estaba en el último año de la Facultad de Historia, sucedió algo curioso. Como soy lector empedernido, encontré un libro de Tullio Ascarelli, “Teoria della concorrenza e dei beni immateriali”. Me dio curiosidad y lo adquirí, entre otras razones, porque estaba con un súper descuento debido a que nadie lo compraba. De regreso a mi casa lo comencé a leer. Me fascinó y ese mismo día no solo me reencontré con el Derecho, sino que identifiqué las áreas en las que he trabajado siempre: Derecho de la competencia y propiedad intelectual.

¿Puede indicar una meta mediano plazo?

Que el estudio de abogados ocupe un lugar preferente en el mercado legal de mi país. Estamos honrados de haber iniciado con un primer puesto en Chambers & Partners. Pero no por el número de clientes ni por sus ingresos, sino porque sea respetado por hacer un trabajo impecable en el menor tiempo posible. En el derecho de la competencia los plazos son relativamente cortos y los consejos deben ser rotundos. Quiero señalar otra cosa que para mí es lo más importante: espero que mis socios, los abogados jóvenes que me honran con su compañía, puedan alcanzar sus sueños de vida. Quiero dejarles ese pequeño legado.

¿Tiene un mentor que le haya ayudado en su carrera o un abogado a quien admire? ¿Por qué?

Sin la menor duda. El Dr. Baldo Kresalja Roselló. Fue mi profesor, asesor de tesis, quien me recomendó a las becas que obtuve y a mis trabajos iniciales. Más adelante me confió encargos que me han honrado profundamente y que no necesariamente estaban vinculados con mi especialidad de derecho. Nunca he dejado de consultarle sobre los temas importantes de mi vida, puesto que su consejo siempre ha sido el correcto además de que ha actuado con gran generosidad. Me siento privilegiado con su amistad y es el referente profesional y, especialmente, moral en mi vida. He tratado de seguir su ejemplo.

¿Qué libro o película que recomendaría para estudiantes de derecho?

“The insider”, de Michael Mann, el cual aborda una conspiración empresarial en contra de la salud pública y la colaboración de un informante para hacer públicos dichos hechos. Asimismo, recomendaría "Flight”, de Robert Zemeckis, relacionado con un accidente de un vuelo comercial y una aparente negligencia de parte del piloto de dicho vuelo. Ambas películas presentan diversos dilemas éticos que los alumnos deberán abordar tanto desde la perspectiva de la autoridad como de la defensa privada que ejerce un abogado. Respecto a libros, sin duda los de John Grisham en los que, de manera sencilla, se aprende Derecho.

¿Qué sería si no fuera abogado?

Me gustan mucho la historia y el arte. Es más, casi dejo la Facultad de Derecho para estudiar Historia del Arte. Fue una decisión complicada y, claro está, generó los típicos enfrentamientos con mis padres. Finalmente hice una locura desde la perspectiva de carga académica: continuar con mis estudios de Derecho y, en paralelo, matricularme en la Facultad de Historia. La carga académica era impresionante. No me arrepiento, puesto que la historia me hizo entender el porqué de muchas cosas y el arte ha enriquecido mi vida. Actualmente, brindo a los alumnos de la universidad la perspectiva histórica de las instituciones jurídicas. Ello les permite entender cómo surgen y como se desarrollan. Son las que más gustan. Por otro lado, tengo una galería de arte que me brinda paz, puesto que me acompaña la belleza y brinda alegría a quienes me visitan.