Fecha de publicación: 07/10/2015
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Brasil ejecutó este miércoles, 7 de octubre, la primera ronda de licitaciones desde 2013 y la décimo tercera de licencias para petróleo y gas de la nación. En la convocatoria se ofertaron concesiones para 266 bloques de exploración, de los cuales 182 eran en tierra firme y 84 en alta mar, y no hubo restricciones a la participación extranjera.
Esta 13° Ronda se hizo en medio de un ambiente convulso marcado por el escándalo de corrupción en Petrobras y una profunda recesión económica.
Las áreas terrestres subastadas están en el Amazonas, Parnaíba, Potiguar y Recôncavo, mientras las áreas marítimas están en Camamu-Almada, Campos, Espíritu Santo, Jacuípe, Pelotas y Sergipe-Alagoas.
En la subasta estaban autorizadas 37 empresas, entre estas BP, ExxonMobil, Premier Oil, CNOOC, Total y Royal Dutch Shell, además de otras cuatro que participaban por primera vez: Geopar-Geosol, Parnaíba Participações, TSL Empa y Tek Óleo e Gás.
El gobierno de Dilma Rousseff esperaba un movimiento de hasta 2,8 mil millones de reales (o 718 millones de dólares) en bonos por la licitación, con una cuota mínima de inscripción para todos los bloques de 978 millones de reales y bonos pagaderos antes del 15 de diciembre de este año.
Resultados
La subasta concluyó con la adjudicación de solo 13,9% de los bloques ofrecidos, aunque el golpe más bajo es que estos no atrajeron a las grandes empresas petroleras ni a su estatal Petrobras.
Apenas 37 de las 266 áreas ofrecidas en licitación fueron adjudicadas a empresas medianas y otras brasileñas, quienes fueron las que dominaron la subasta, a excepción de Oil M&S, de Argentina, que se adjudicó los derechos para explorar y explotar hidrocarburos en los bloques de Recôncavo.
Aparte de esta, Petrosynergy, de Panamá, adquirió licencias en la misma zona mientras GDF Suez, de Francia, se hizo socio minoritario junto a Parnaíba Gas Natural, de Brasil, en las concesiones sobre dos bloques en el río Parnaíba, con 35 y 65 por ciento respectivamente.
La petrolera francesa también se hizo socia minoritaria, con la misma proporción, de Alvopetro, de Canadá, en la concesión de cuatro áreas en el Recôncavo. Queiroz Galvao, la única empresa grande en mostrar interés, compró derechos de explotación para dos bloques en aguas profundas en el océano Atlántico, en Alagoas.
En resumen: de las 37 empresas (de 17 países) inscritas, 18 de 5 naciones realizaron ofertas. Con esto la Agencia Nacional del Petróleo (ANP) recaudó por todas las concesiones 121,1 millones de reales (30,3 millones de dólares) en licencias vendidas.
Esta 13° Ronda se hizo en medio de un ambiente convulso marcado por el escándalo de corrupción en Petrobras y una profunda recesión económica.
Las áreas terrestres subastadas están en el Amazonas, Parnaíba, Potiguar y Recôncavo, mientras las áreas marítimas están en Camamu-Almada, Campos, Espíritu Santo, Jacuípe, Pelotas y Sergipe-Alagoas.
En la subasta estaban autorizadas 37 empresas, entre estas BP, ExxonMobil, Premier Oil, CNOOC, Total y Royal Dutch Shell, además de otras cuatro que participaban por primera vez: Geopar-Geosol, Parnaíba Participações, TSL Empa y Tek Óleo e Gás.
El gobierno de Dilma Rousseff esperaba un movimiento de hasta 2,8 mil millones de reales (o 718 millones de dólares) en bonos por la licitación, con una cuota mínima de inscripción para todos los bloques de 978 millones de reales y bonos pagaderos antes del 15 de diciembre de este año.
Resultados
La subasta concluyó con la adjudicación de solo 13,9% de los bloques ofrecidos, aunque el golpe más bajo es que estos no atrajeron a las grandes empresas petroleras ni a su estatal Petrobras.
Apenas 37 de las 266 áreas ofrecidas en licitación fueron adjudicadas a empresas medianas y otras brasileñas, quienes fueron las que dominaron la subasta, a excepción de Oil M&S, de Argentina, que se adjudicó los derechos para explorar y explotar hidrocarburos en los bloques de Recôncavo.
Aparte de esta, Petrosynergy, de Panamá, adquirió licencias en la misma zona mientras GDF Suez, de Francia, se hizo socio minoritario junto a Parnaíba Gas Natural, de Brasil, en las concesiones sobre dos bloques en el río Parnaíba, con 35 y 65 por ciento respectivamente.
La petrolera francesa también se hizo socia minoritaria, con la misma proporción, de Alvopetro, de Canadá, en la concesión de cuatro áreas en el Recôncavo. Queiroz Galvao, la única empresa grande en mostrar interés, compró derechos de explotación para dos bloques en aguas profundas en el océano Atlántico, en Alagoas.
En resumen: de las 37 empresas (de 17 países) inscritas, 18 de 5 naciones realizaron ofertas. Con esto la Agencia Nacional del Petróleo (ANP) recaudó por todas las concesiones 121,1 millones de reales (30,3 millones de dólares) en licencias vendidas.
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