“Legal Design”: el derecho centrado en personas

¿Cómo aplicar el “legal design”?
¿Cómo aplicar el “legal design”?
Por ejemplo: este año recibimos el encargo por parte de un equipo de abogados in-house de convertir un contrato de obra, de 100 páginas, en uno visual
Fecha de publicación: 22/09/2021

Basta mirar los pensums o sílabos de las Facultades de Derecho en el mundo para verificar que la enseñanza se ha construido y se sigue construyendo desde las leyes que lo componen y no desde las necesidades de la sociedad a la que debe servir nuestra profesión. Eso ha permitido la creación de un microcosmos de abogados, hablamos para abogados y en lenguaje de abogados. 

El diseño legal o legal design nos invita a empatizar con las necesidades de los usuarios del derecho y humanizarlo. Se trata de la importación y adaptación al derecho del “design thinking, una metodología que propone generar ideas innovadoras centrándose en la eficacia para entender y solucionar necesidades concretas y reales de los usuarios. Esta puede ser aplicada a un sinfín de situaciones, incluyendo el diseño de productos y servicios de diversa índole.

“¿De acuerdo, Oscar, pero dame un ejemplo concreto de cómo aplicar el legal design?” Hablemos del contrato visual, un documento legal y vinculante cuya diferencia principal es que cuenta con una mejor experiencia de usuario, que permite tomar decisiones más autónomas sobre temas legales eliminando, entre otras cosas, la litigiosidad y el nivel de controversia involucrados en contratos convencionales. 


Consulta más episodios de Las ardillas en el cable Aquí 👈🏼


Un contrato visual no solo es más fácil de entender, sino que aumenta la confianza en los clientes, debido a que la forma en la que se exponen sus contenidos es más transparente y responde a sus necesidades reales.

Este año recibimos el encargo por parte de un equipo de abogados in-house, concretamente una gerencia legal, de convertir un contrato de obra en uno visual. El reto fue grande ya que se trataba nada más y nada menos que de un documento muy complejo de casi 100 páginas. El ejercicio fue muy interesante ya que el 80 % del trabajo se enfocó en entender no solo la lógica del contrato sino cómo, a través de este, se intentó cubrir las necesidades de todas las áreas internas de la empresa. Este es tan solo un ejemplo del enorme potencial del “legal design”.
 
Por lo tanto, “legal design” no es hacer cuadros sinópticos o resúmenes de textos con emojis, sino más bien entender a profundidad la estructura legal de un contrato, mejorarla y hacerla más funcional, algo que tradicionalmente ha sido abandonado por los abogados. Esto implica conocer más derecho del que uno puede pensar, pero también implica excederlo y combinarlo con otros elementos que lo complementan. ¿No suena maravilloso? Si quieren saber más de esta especialidad que cobra vigencia progresiva dentro del NewLaw los invito a escuchar esta conversación con Jessica Cubas, diseñadora legal a quien invite a este episodio. 

 

Add new comment

HTML Restringido

  • Allowed HTML tags: <a href hreflang> <em> <strong> <cite> <blockquote cite> <code> <ul type> <ol start type> <li> <dl> <dt> <dd> <h2 id> <h3 id> <h4 id> <h5 id> <h6 id>
  • Lines and paragraphs break automatically.
  • Web page addresses and email addresses turn into links automatically.