Desde el inicio de nuestra sección hemos publicado una serie de artículos enfocados en la innovación y el desarrollo de la tecnología con impacto en los servicios legales.
Su importancia e impacto es innegable. Así también la necesidad de entender, definir e implementar una estrategia para lograr innovar en los procesos y sistemas operativos de las firmas y departamentos legales, incorporando desarrollos tecnológicos para ser más eficientes, lo que en su conjunto implica la transformación digital en la que toda firma debe trabajar.
Después de año y medio ejerciendo en remoto, las firmas -y sus líderes y socios- deben tener claro que la estrategia que apliquen para su transformación digital debe ser consistente con su cultura y entender que el desarrollo digital que la firma requiere no se satisface solo por tener una infraestructura tecnológica que les permita trabajar en remoto utilizando programas de videoconferencias.
En Gestión LexLatin hemos publicado artículos escritos por consultores, académicos y abogados en ejercicio quienes han desarrollado el tema desde distintos enfoques.
Conscientes estamos -y así ha quedado reflejado en distintas investigaciones hechas por universidades e instituciones- de que la tecnología y el uso de desarrollos tecnológicos ocupan una posición preponderante en el ejercicio de la profesión y en la formación legal.
En América Latina aún tenemos mucho por hacer tanto en la investigación y desarrollo como en la utilización de las nuevas tecnologías empleadas en el sector de los servicios legales; herramientas tecnológicas que deben ser aliadas de las firmas para que estas logren niveles de eficiencia que les hagan más competitivas en la prestación de sus servicios y, por ende, en los costos de los servicios que prestan.
Continuar generando conciencia en las firmas y en sus líderes en el porqué deben abrazar el desarrollo digital, determinar dónde radica la necesidad que tienen de innovar para desarrollar nuevos procesos o bien actualizar los existentes, saber escuchar a las nuevas generaciones versadas en la utilización de las nuevas tecnologías, nos lleva a continuar desarrollando el tema publicando artículos enfocados en el desarrollo y la transformación digital.
Con este contexto en mente hemos celebrado una alianza estratégica con ALIL (Alianza Latinoamericana para la Innovación Legal) cuyos objetivos se alinean con el interés de LexLatin de promover la innovación legal en nuestra región, desarrollar una comunidad interesada en este tema, fomentar el conocimiento científico aplicado al derecho, colaborar con universidades e instituciones educativas para rediseñar sus programas de estudios y trabajar con agencias y organismos estatales y multilaterales para facilitar el acceso a la justicia con el fin de promover y acelerar la transformación digital en la región.
En el marco de nuestro acuerdo seguiremos publicando artículos de miembros y aliados de ALIL, quienes han desarrollado el tema. Estamos apoyando igualmente el interés de ALIL en el desarrollo de proyectos que promuevan el desarrollo digital y tenemos otros planes dentro de nuestros mutuos objetivos.
Esta asociación estratégica de valor, tanto para ALIL como para LexLatin, no es excluyente: es de interés mutuo seguir sumando voces que apoyen nuestros objetivos y, por qué no, nuestra cruzada para seguir generando conciencia en el sector de los servicios legales para que las firmas —independientemente de su tamaño— inviertan tiempo, dinero y esfuerzo en sus proyectos de innovación y transformación digital.
Confiamos en que esta cooperación sumará valor al ecosistema jurídico de toda Latinoamérica e impulsará a la región para lograr un lugar destacado en el ámbito mundial de la industria legal.
Fernando es abogado egresado de la Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, y de la Universidad de Los Andes, Venezuela. Es un miembro destacado de la fraternidad jurídica global y ha contribuido al desarrollo de la comunidad jurídica internacional. Después de una exitosa carrera en la International Bar Association (IBA), organización que presidió entre 2009 y 2010, Fernando fue presidente de LexMundi (1992-1993).
Fue socio fundador de Hoet Peláez Castillo Duque, uno de los principales despachos de abogados venezolanos, en el que fue socio administrador. Antes de incorporarse a la firma en Caracas, en 1977, ejerció en México, París y Londres.
Fernando está retirado de su firma y en 2013 formó FPeláez Consulting, dedicada a brindar servicios de consultoría a firmas de servicios profesionales. Fernando sigue activo en la IBA, es presidente de la Comisión sobre el Futuro de los Servicios Legales y miembro honorario vitalicio del Consejo de la IBA.
Es, además, director académico de dos programas ejecutivos del IE Law School (Madrid): el “Lawyers Management Program” y el de Transformación Digital. Como resultado de sus actividades y de su participación en distintos consejos y comités enfocados en el desarrollo del sector de los servicios legales, su interés y entusiasmo sobre el tema se mantiene vigente y en desarrollo constante ([email protected]).
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