El 13 de septiembre, la firma neoyorquina Kirsch & Niehaus, PLLC presentó, ante el tribunal federal de distrito del Distrito Sur de Nueva York, una demanda por infracción de derechos de autor contra Netflix, Inc. y Hwang Dong-hyuk (director y guionista surcoreano) acusados por ellos y el cineasta indio Soham P. Shah de copiar la historia y el guión de la película hindi Luck para producir Squid Game (El juego del calamar), una de sus más exitosas series, que ambos demandantes aseguran es una copia de Luck.
Shah (autor, guionista y director de cine) exige una orden judicial permanente y el pago de una compensación por daños por la violación de su historia y guión, así como por sus derechos infringidos. Al respecto, la firma señala que El juego del calamar produjo cerca de 1.000 millones de dólares en ganancias para Netflix y que continúa generando ganancias a partir de la explotación de la propiedad intelectual plagiada con las obras derivadas El juego del calamar: el desafío, El juego del calamar: el juicio, El juego del calamar: la experiencia y las temporadas 2 y 3 de la serie coreana.
Las similitudes entre ambas historias se basan en: Luck, estrenada en 2009, cuenta la historia de un grupo de personas que son reclutadas por un capo para participar en una serie de desafíos letales, sobre los que jugadores de todo el mundo apuestan y quienes, al pasar el tiempo, notan que con la muerte de los concursantes aumenta el premio final. El juego del calamar, estrenada en 2021, cuenta la historia de un grupo de concursantes, sumidos en graves deudas, que son reclutados a la fuerza para participar en un juego infantil mortal para ganar un premio mil millonario.
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El documento introducido a la corte indica que “la producción y distribución de la serie de streaming Squid Game, por parte de Netflix infringe los derechos de autor de Shah sobre Luck. La trama principal, los personajes, los temas, el estado de ánimo, el entorno y la secuencia de eventos de Squid Game son sorprendentemente similares a los de Luck, lo que desafía cualquier posibilidad de que tales similitudes puedan ser una coincidencia.”
En la demanda se puede leer que Soham Shah, en su carácter de creador y propietario exclusivo de los derechos de autor del guión de Luck, también posee ciertos derechos de autor sobre la película en sí, de conformidad con la Ley de Derechos de Autor de la India de 1957, en la que el autor es el productor de una película. Esta ley también dice que los derechos de autor sobre una obra cinematográfica no afectarán los derechos de autor separados sobre cualquier obra respecto de la cual, o una parte sustancial de la cual, la película se haya realizado.
La película india es una obra original con material sujeto a derechos de autor, protegidos en Estados Unidos según el artículo 17 U.S.C. § 101 y globalmente por el Convenio de Berna. En la ley, de acuerdo con la demanda, a falta de una disposición escrita en la que se establezca lo contrario, la propiedad de los derechos de autor recae automáticamente en el autor de la obra, por lo que Shah, visto a la luz de estos tres cuerpos normativos, conserva un interés de propiedad de los derechos de autor en la película.
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Entonces, ya que –acorde a la demanda– la conducta infractora de los demandados “fue y sigue siendo intencional” y esto les ha permitido obtener “ganancias ilegales”, de conformidad con el artículo 504(b) del título 17 del Código de los Estados Unidos, Shah tiene derecho a recuperar las ganancias de Netflix atribuibles a su conducta infractora así como a un fideicomiso constructivo con respecto a dichas ganancias sobre Squid Game (y sus temporadas 2 y 3), Squid Game: The Challenge, Squid Game: The Challenge II, Squid Game: The Trials, The Best Show on the Planet y los beneficios derivados de Netflix.shop, Hot Topic y cualquier otro minorista o tienda relacionada con estas obras.
Entretanto, Netflix y Dong-hyuk niegan las acusaciones del director indio. En un comunicado, la empresa de streaming dijo que El juego del calamar fue creada y escrita por Hwang Dong-hyuk por lo que –al ser un trabajo original– las acusaciones de Shah no tienen fundamento ergo tiene “la intención de defender este asunto enérgicamente”.
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