Roberto Rodríguez es el nuevo socio y jefe del área de litigios en Lexincorp, Nicaragua. Apasionado por la justicia y la equidad decidió dedicarse al derecho antes que a su legado familiar.
¿Por qué decidió hacerse abogado?
Decidí ser abogado porque me apasiona la justicia y la equidad y nada mejor que ser el vehículo que la lleve a buen término, dando a cada quien lo que le corresponda.
¿Puede indicarnos una meta a mediano plazo?
Involucrarme de lleno en la firma y tratar de incorporarme en la región.
¿Puede decirnos a quién admira como mentor (o un abogado que admire) y por qué?
He tenido mentores que me han apoyado en el camino. Como abogado siento un gran respeto por el doctor Iván Matamoros, antiguo maestro de Universidad, quien a su vez ha transmitido su deseo de superación y hoy en día es abogado con gran prestigio en el país.
¿Puede indicarnos una película o libro que recomendaría a los estudiantes de Derecho?
Una película que podría recomendar es La Raíz del miedo con Richard Gere y como libro El Proceso, de Franz Kafka.
Si no fuese abogado, ¿cuál profesión hubiese escogido? ¿Por qué?
Sería agrónomo, sin duda. Me crié en el norte del país siempre rodeado de café, ganado y hortalizas. Soy de la cuarta generación de una familia de caficultores, lo cual es parte de mi legado familiar.
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