María José Henríquez se estrena como socia en la firma chilena Morales & Besa, aunque ya lideraba el área de libre competencia desde 2016. No necesita presentación porque sus respuestas a nuestro Cuestionario LexLatin la revelan.
¿Por qué decidió hacerse abogada?
En Chile debes elegir qué carrera seguir a los 18 años. A esa edad solo tenía claro que a pesar de mi enorme interés por la economía no tenía tanta facilidad para las matemáticas. Así es que mi decisión se basó en elegir estudiar Derecho por la amplitud de esta disciplina, lo que eventualmente me iba a permitir acercarme al área económica. Afortunadamente pude hacerlo especializándome en libre competencia a partir del tercer año de carrera, cuando empecé a trabajar teniendo solo 21 años.
Sorprendentemente y a pesar de mi inclinación hacia la parte económica, del estudio de la carrera lo que más me gustó fueron los cursos de Teoría del Derecho y Filosofía. Me apasionó entender la razón que está detrás de la estructura del sistema legal y que no se trata únicamente de una colección de normas. En la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile tuve excelentes profesores de teoría legal y, de hecho, fui ayudante del Departamento de Ciencias del Derecho.
Durante mi LL.M. en Regulación de los Negocios y Antimonopolio en la New York University también traté de tomar todos los cursos de teoría legal que pude, a pesar de que estaba en un programa especializado en antitrust. De esa última experiencia recuerdo lo impresionada que quedé con Jeremy Waldron, un aún joven talento de teoría y filosofía legal y política que daba unas cátedras impresionantes.
¿Puede indicarnos una meta a mediano plazo?
De cara a mi nombramiento, mi meta es seguir siendo un aporte al crecimiento y desarrollo de Morales & Besa en el corto y mediano plazo y que eso se mantenga en el tiempo haciendo crecer el área de libre competencia en forma acorde con las proyecciones que nos hemos planteado en conjunto con la firma.
¿Puede decirnos a quién admira como mentor (o un abogado que admire) y por qué?
Diría que el mayor impacto en la carrera de cualquier abogado viene de los primeros jefes y luego de las personas con que se va trabajando a lo largo de los años. Pero si hablamos de admiración y aprendizaje, diría que el mayor impacto ha sido el de mis colegas con las que trabajé en la Fiscalía Nacional Económica antes de integrarme a Morales & Besa: las abogadas Vanessa Facuse, Carolina Bawlitza y la doctora en economía, Ana María Montoya.
Además de que conservamos una amistad hasta el día de hoy, lo más relevante es lo que aprendí de cada una: el valor del trabajo duro, la capacidad de mirar el panorama completo y al mismo tiempo, de detenerse en los detalles, y sobre todo en que los desafíos salen mejor cuando se disfruta lo que se hace. Por otro lado, pienso que nuestra profesión, sobre todo en un área como la mía, debe necesariamente relacionarse con la visión de negocio y el servicio de excelencia y eso es algo de lo que he aprendido mucho gracias al apoyo de los socios de M&B.
¿Puede indicarnos una película o libro que recomendaría a los estudiantes de Derecho?
En mi tiempo libre trato de ser lo menos abogada que puedo, y distraerme con series, películas y libros que no tengan que ver con el derecho.
De todas maneras recomiendo ver el documental sobre Ruth Bader Ginsburg, ministra de la Corte Suprema de Estados Unidos, que desde mi punto de vista deja dos grandes lecciones: primero, que el éxito siempre se apoya en un sistema familiar o de redes que permite desarrollarse profesionalmente; y segundo, que el mismo también se relaciona con mantener un esquema básico de valores que se transmita a todo ámbito de la vida, y que pese a lo muy adversas que sean las circunstancias, nunca debemos renunciar a ellos.
También recomiendo ver la serie brasilera sobre el caso Lava Jato, El Mecanismo. Entretenida, rápida y muestra otra cara del ejercicio profesional. Para los abogados es interesante, porque ante la magnitud de la red de corrupción, como espectador se está siempre buscando que la ley y sus practicantes sean una especie de salvación. Buena para entender el correcto rol que debemos tener los abogados, dilemas éticos y el profesionalismo.
Si no fuese abogada, ¿cuál profesión hubiese escogido? ¿Por qué?
Sería licenciada en Economía, sin dudas.
}
Add new comment