El pasado jueves 27 de abril la firma internacional Holland & Knight dio a conocer que 17 abogados provenientes de la firma mexicana Sánchez Devanny se incorporaban a sus oficinas en Ciudad de México y Monterrey.
Este movimiento, según Luis Rubio Barnetche, socio director de Holland & Knight en la Ciudad de México, es la concreción de un plan de expansión de largo plazo que fortalece prácticas como aduanas, laboral, comercio exterior y compliance, además de que impulsa la creación del área de derecho ambiental y añade el derecho colectivo a la práctica laboral.
“En Monterrey, [el movimiento] nos posiciona de forma importante y robustece nuestro equipo, pasamos de ser 6 abogados a 20. Los socios y abogados que se unen a la firma son muy reconocidos. La decisión está impulsada en parte por la fusión que tuvimos hace dos años con Thompson & Knight, la atención al sector industrial, al que está muy enfocado la firma en esta zona y una combinación de elementos que hacen mucho sentido: Texas, norte de México, USMCA y nearshoring”.
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Se suman a la oficina de Monterrey
Gerardo Prado Hernández (socio), Francisco Andrés Gámez Garza (socio), Humberto Morales Barrón (socio), José Ricardo Ibarra Córdova (socio), Jaime Israel Moreno Treviño (socio), Oscar Alejandro Quiroz Chávez (socio), Rogelio Azcárraga Ibargüengoitia (sénior counsel), junto con seis asociados.
Se suman a la oficina de Ciudad de México
Turenna Ramírez Ortiz (socia), Claudia Georgina García-González (sénior counsel) y dos asociados.
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¿Qué representa la escisión de la oficina en Monterrey de Sánchez Devanny para Holland & Knight?
El equipo que Gerardo Prado, Francisco Andrés, Humberto Morales, José Ricardo Ibarra, Jaime Israel Moreno y Oscar Alejandro habían conformado en Monterrey para Sánchez Devanny logró consolidarse como una de las oficinas más importantes para la industria automotriz, retail, farmacéutica y maquila, refiere Leopoldo Hernández Romano, socio director de la consultora Kerma Partners.
“Creo que no han estado bien manejadas las estrategias de las firmas texanas en México, siendo que Texas tiene un valor comercial con México muy grande y, considerando que la fusión de Thompson & Knight con Holland resultó en una fuerte práctica en Texas con una oficina en Monterrey, explorar Monterrey para, a partir de ahí, fortalecer su práctica de América Latina, hace sentido”, comenta el consultor.
Además de la especialización en la atención de un tipo de clientes en común, Hernández Romano considera que hay una gran oportunidad en el espacio de Holland & Knight para explotar un equipo talentoso, encabezado por Gabriel Ruiz, para ganar una importante participación en el mercado, por la cultura de Holland & Knight que ya de por sí cuenta con elementos que “entienden muy bien y se comunican bien con Latinoamérica, como Roberto Pupo”.
En contexto, mediante comunicado oficial, el Gobierno de Nuevo León difundió que durante 2022 la inversión extranjera directa captada fue de 4.397 millones de dólares, 9,2 % más de lo captado en 2021. Esta cifra representa el 12,45 % del total nacional y, en otras palabras, es la cifra que convierte al estado en el más importante, después de la Ciudad de México, al atraer capital del exterior.
A decir del secretario de economía, Iván Rivas, “el 50 % de las empresas que están aprovechando el nearshoring voltean a Nuevo León por su cercanía con Estados Unidos, el capital humano y la seguridad”. Un ejemplo reciente es el acuerdo del gobierno mexicano con el empresario Elon Musk, quien busca construir ahí la planta de vehículos eléctricos ‘más grande del mundo’.
Para Sánchez Devanny, refiere el consultor, “es un buen momento para realizar cambios a nivel de estructura para fortalecerse internamente y continuar manteniendo su posición en el mercado”.
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Mirada estratégica de Sánchez Devanny
En 2021, narra Ricardo León, managing partner de Sánchez Devanny, “hicimos un diagnóstico de nuestra relación societaria. ¿Por qué? Porque siempre es importante darle mantenimiento a las relaciones societarias. El diagnóstico nos daba una serie de recomendaciones por las que abrimos un proceso de votación para realizar cambios en el ejercicio de trabajo”.
León detalla que, sin importar la contribución en la facturación de la firma, todos los socios y las socias de Sánchez Devanny tienen un voto, incluso socios equity, y que uno de los puntos de la votación se realizó sobre el esquema de compensación, que —refiere el managing partner— se basaba en una fórmula que si bien era meritocrática, también era individualista, “un esquema muy construido en el yo”. Por lo que había cierto consenso en cambiar la cultura de la firma, que involucraba incluso cambios en los KPI para fomentar el trabajo en equipo y, al mismo tiempo, cambios sobre la dinámica de trabajo que se realizaba en una especie de 'silos'.
“Concluímos que teníamos que cambiar, hacer que las personas trabajaran en esquemas colaborativos y para ello debíamos asegurarnos incluso de que la mejor persona para atender los asuntos fuera —independientemente de quién administra la relación del día a día—realmente la mejor. En fin, para poder aplicar esa filosofía, teníamos que transformar o alinear el esquema de compensación”.
De acuerdo con Ricardo León esta conversación terminó en octubre pasado (2022), se recogieron los votos formalmente y en diciembre se comenzó a aplicar la nueva dinámica: de los 21 socios que votaron, 18 estuvieron a favor del cambio y 3 no. Estos votos, en parte, explican la reciente salida de socios.
“Se fueron 4 socios con algunos miembros de su equipo, particularmente dos de ellos con gran parte de su equipo, pero una de las cosas que hemos estado trabajando es en caminar hacia la institucionalidad: tenemos otros dos socios en comercio interior, con un equipo robusto de trabajo; en corporate governance y anticorrupción se queda 1 socio, el mejor rankeado; en corporativo y energía se van dos socios y hay múltiples socios que se quedan, con equipos robustos también”.
José Berrueta Ochoa se incorporó el año pasado a Sánchez Devanny para desarrollar capital markets y, sobre lo que viene, hay negociaciones avanzadas para reforzar ciertas prácticas. Específicamente en Monterrey, a decir del socio director, se quedan 4 socios, incluído el propio Ricardo León, con una suma de 110 profesionales, en sus 3 oficinas del país.
“Hecho el análisis matemático de las salidas, al compararlo con el potencial de salida del negocio: no estamos teniendo una afectación dramática. Está encapsulado en un paquete de clientes que anticipamos iban a migrar con ellos [...] Vamos a enfocarnos en robustecer la clientela atendiendo el ciclo económico que está viviendo en este momento Monterrey y la sensibilidad de la Ciudad de México”.
La ventaja de la situación, comenta el socio director de Sánchez Devanny, es que 'el grupo de socios que nos quedamos tenemos un mindset alineado: “visión de firma, de futuro"'.
"Queremos avanzar en un mismo camino, continuar con la aplicación del cambio de estrategia considerando que hará crecer los perfiles talentosos dentro de la firma y la implementación de una visión a largo plazo”.
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