Buk, startup chilena de gestión de recursos humanos, recibió 50 millones de dólares en su ronda de inversión Serie A, que fue liderada por el el fondo estadounidense de capital de riesgo Greenoaks y en la que también participaron la corporación japonesa SoftBank y un grupo de fundadores de unicornios como Rappi (Colombia), Kavak, Konfío, Grupo Bursátil Mexicano (GBM), todas mexicanas, Ualá (Argentina) y Brex. Se cree que esta es la mayor ronda de financiamiento Serie A realizada por una startup en Latinoamérica.
Gunderson Dettmer Stough Villeneuve Franklin & Hachigian (Silicon Valley) y Guerrero Olivos (Santiago de Chile), esta última en aspectos corporativos y tributarios chilenos y cross-border de la transacción, coordinó los distintos equipos de abogados extranjeros que formaron parte de la misma. La firma, además, apoyó a Buk en la ronda de financiamiento/ levantamiento de capital, que concluyó el 5 de octubre.
Guerrero Olivos comentó que esta fue una operación compleja que involucró una reestructuración corporativa/tributaria internacional, que incluyó siete jurisdicciones diferentes (Canadá, Islas Caimán, Estados Unidos, México, Colombia, Perú y Chile) y que se tuvo que negociar y materializar en un periodo de tiempo corto.
Agregó que esta operación está dentro de las top 4 por valor en la historia de Chile, y quizás top 1 de empresas radicadas en ese país y sin matriz extranjera.
Grenoaks contrató a Carey (Santiago de Chile) y a Wilson Sonsini Goodrich & Rosati (Nueva York), pero este último despacho no atendió nuestros pedidos de información.
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De acuerdo con Gunderson Dettmer, esta es una de las primeras rondas de financiamiento de capital riesgo institucional más grandes (si no la más grande) planteadas por una startup latinoamericana y que convierte a Buk en la tercera startup más valiosa de Chile (417 millones de dólares). En el primero y segundo puestos están Cornershop y NotCo.
Es la primera vez que Buk recibe financiamiento institucional. Ahora, con el capital obtenido, espera impulsar su crecimiento en México, donde está iniciando operaciones, y consolidarse en Perú y Colombia, mercados a los que llegó en 2019 y 2020, respectivamente, así como potenciar el desarrollo de su tecnología y de nuevos productos y concretar adquisiciones en la región. Fundada en 2017 por cinco emprendedores chilenos, la plataforma gestiona todo el sistema de recursos humanos, incluyendo el pago y el desarrollo profesional, evaluaciones de desempeño, encuestas de clima organizacional, control de asistencia y módulos de reclutamiento y selección a través de un software en la nube.
Este año otras startups chilenas han recibido inyección de capital. Destacan Xepelin, que obtuvo 230 millones de dólares en su ronda de inversión Serie A; Betterfly, con una recaudación de 60 millones de dólares en la ronda de financiamiento Serie B y Phage Technologies con 30 millones de dólares en su segunda ronda de inversión.
Carey también trabajó en estas operaciones:
-Masisa vende parte de su negocio forestal al fondo libanés GFP
-CMPC emite bonos por 500 millones de dólares
-Banmédica cancela inscripción de acciones en Chile
Asesores legales
Asesores de Buk:
- Gunderson Dettmer Stough Villeneuve Franklin & Hachigian (Silicon Valley): Daniel M. Green. Asociado Eduardo Espinosa de los Monteros Pereda. Abogado Daniel Gallo. Paralegal Wyatt Stillman.
- Guerrero Olivos (Santiago de Chile): Socios Benjamín Pérez, Pedro Lyon, Pedro Pellegrini Ripamonti y Alejandro Chechilnitzky. Asociados Francisca Martínez, Jaime Antoñanzas B., Alfonso Niklitschek, Maximiliano Reyes, Pablo Escobar y Joaquín Merino.
Asesores de Grenoaks Capital Partners:
- Carey (Santiago de Chile): Socio Francisco Guzmán. Asociada Constanza Rivera.
- Wilson Sonsini Goodrich & Rosati (Nueva York)*
*La firma no respondió nuestras solicitudes de información
**Esta nota fue actualizada el 30 de noviembre para incluir al equipo de Carey
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