La reducción de los plazos en conciliación y los diagnósticos de cumplimiento laboral como estrategia legal

A partir de este mes, José Alberto Sánchez Medina es socio de la práctica de Consultoría y Litigio Laboral en Ferrán Martínez Abogados. / Diseño: Miguel Loredo - LexLatin.
A partir de este mes, José Alberto Sánchez Medina es socio de la práctica de Consultoría y Litigio Laboral en Ferrán Martínez Abogados. / Diseño: Miguel Loredo - LexLatin.
La reforma constitucional del 2017 y la Ley reglamentaria del 2019 empiezan a rendir frutos. El avance se plasma en la menor duración de las controversias laborales.
Fecha de publicación: 04/05/2023

Datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de México (STPS) -actualizados a febrero de 2023- permiten conservar el optimismo sobre la reducción del tiempo en las controversias. El indicador, además, supone que una menor cantidad de disputas laborales se adosa a la carga de los tribunales. 

Hasta 2021, la entidad responsable de la implementación de la reforma laboral reveló que al menos 70 %  de los conflictos se resolvían por la vía de la conciliación. Este año la cifra asciende a 75,5 % a nivel nacional. ¿Qué ha contribuido con esta mejora?

A decir de José Alberto Sánchez Medina, socio de Ferran Martínez Abogados, este buen rendimiento es fruto de la Reforma constitucional de 2017 y la Ley Reglamentaria de mayo de 2019. Para el especialista su entrada en vigor fue el principal hito responsable de la reducción del tiempo de duración de las controversias laborales.  

“Se debe al requisito indispensable, con sus excepciones, de agotar la instancia conciliatoria que tiene una duración máxima de 45 días. Dicho ello, si se agota el procedimiento en esos términos nos encontramos ante una inusitada rapidez para ponerle fin a los conflictos. En entidades como el Estado de México, poco más del 50 % de las controversias en materia local concluye en la instancia conciliatoria”, detalla.

La clave está en el manejo del tiempo, concretamente en los plazos establecidos. 

"Si la controversia trasciende a una autoridad de carácter jurisdiccional, el diseño reglamentario del proceso está previsto para durar entre 6 y 10 meses, aunque no en todos los tribunales se cumple de forma exitosa, debido a la carga de trabajo del propio órgano jurisdiccional o por las características del juicio. Pese a ello, la construcción teórica del procedimiento laboral, así como la menor carga de trabajo que algunos tribunales tienen han reducido significativamente la duración de las controversias laborales”, asegura.

La firma Ferran Martínez, enfocada en asuntos laborales, refuerza su equipo con el nombramiento de José Alberto Sánchez Medina. Con esta promoción, el despacho busca impulsar sus servicios a nivel local e internacional, así como reconocer a los jóvenes talentos que han crecido dentro de la firma. 

Carlos Ferran Martínez Carrillo, socio fundador de Ferran Martínez Abogados, comenta:  

“José Alberto se ha convertido en un pilar de la firma. Su alta capacidad de trabajo y la credibilidad y confianza que genera con nuestros clientes lo convierten en un socio natural de nuestra firma. Nos emociona mucho poder atestiguar el crecimiento de abogadas y abogados como José, que apostaron por la firma desde el primer minuto y que hoy empiezan a crecer de manera exponencial”.


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Luego de reducir el tiempo de las controversias, ¿qué sigue?

De acuerdo con Sánchez Medina, es posible optimizar lo conseguido a partir de ajustes a nivel de gestión. Se trata de distribuir mejor la carga que recae en los centros de conciliación, lo que contribuiría a descongestionar jurisdicciones como la de Ciudad de México.  

“Se sugeriría una distribución más sectorizada para la atención a los solicitantes (de conciliación). Podría ser por zonas o alcaldías, tal y como lo hace la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. Se deben identificar los sectores con más solicitudes de conciliación para dotarles de recursos y personal adicional. Contar con oficinas diversificadas también sería de ayuda, al aminorar el rezago en la atención y desahogar un mayor número de audiencias en un menor tiempo, sin generar retrasos para los usuarios y la propia autoridad”, indica.

José Alberto Sánchez es especialista en la elaboración de reglamentos internos, como procesos de cierre de plantas y terminación de relaciones laborales, incluyendo las de ejecutivos de alto nivel, entre otros. En su experiencia, pese a que ambos ajustes normativos llevan ya varios años en funcionamiento, aún son muchas las compañías que no cuentan con las adecuaciones necesarias para contrarrestar procesos judiciales extensos y desgastantes para ambas partes, ¿cuáles son sus principales recomendaciones?

“Como primer paso, debe existir un proceso de diagnóstico interno en el que las fuentes de empleo verifiquen el nivel de cumplimiento normativo laboral en el que se encuentran, así como un análisis de vulnerabilidad para el caso de presentarse una controversia laboral. Posteriormente, tomar las acciones reactivas y preventivas en línea con el diagnóstico”, explica. 

El abogado comparte las siguientes acciones estratégicas:

  1. Regularizar los contratos de trabajo. 
  2. Analizar la reglamentación interna y robustecer las políticas laborales.
  3. Poner énfasis en los procesos de terminación de las relaciones laborales, contando con la documentación adecuada y los personajes correctos involucrados (jefe directo, personal de recursos humanos o legal laboral).
  4. Buscar procedimientos internos que mejoren la dinámica de las relaciones laborales, procurando que el capital humano se encuentre en una postura de motivación y crecimiento.

En este último punto, Sánchez Medina aborda un aspecto interdisciplinar como la gestión del talento. El abogado insta a reducir la rotación organizacional y, por ende, la cantidad de reclamaciones que pueden recibirse.


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Los avances en materia laboral gracias a las reformas han puesto a México con especial ventaja respecto de la región. Para el abogado, las mejoras tanto a nivel del sistema jurisdiccional como de relaciones colectivas empiezan a solventar la “deuda histórica” que el país norteamericano tiene con la justicia laboral. 

“Actualmente, el país está dando pasos agigantados en aras de un mejor sistema laboral, pero hay mucho por hacer. Consideramos que México a nivel Latinoamérica ha ganado ventaja, pero nuestro parámetro deberá ser con los países líderes a nivel mundial”, concluye.

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