Pablo García es el nuevo socio júnior de Hoet Peláez Castillo & Duque. Ingresó a la firma en 2017 y lidera la recién creada práctica de Derecho deportivo. Desde su nuevo cargo, responde nuestro Cuestionario LexLatin.
–¿Por qué decidió hacerse abogado?
–La situación político social que atraviesa Venezuela desde hace casi 20 años y que ahora vive su peor etapa me hizo ver la abogacía como una opción para, desde mi ventana, aportar con honestidad y buen trabajo a la recuperación de Venezuela, desde lo micro, entendiendo que el cambio nace desde adentro y se propaga. Luego de graduarme de abogado, tomé la decisión de enfocar mi carrera hacia el área legal deportiva. Viendo el deporte como un fenómeno social con la capacidad de cambiar al mundo, decidí sumarle mi trabajo al cambio.
–¿Puede indicarnos una meta a mediano plazo?
–Mi meta a mediano plazo es convertir a HPCD en referencia del derecho deportivo en Venezuela. Ya se han dado pasos en esa dirección y estamos más cerca de lograrlo que cuando empezamos con este proyecto en enero del año en curso.
–¿Puede decirnos a quién admira como mentor (o un abogado que admire) y por qué?
–Todos los socios de la firma han tenido un especial interés en mis ideas y un respeto enorme hacia mis proyectos. Son pocas las personas que se atreven a apoyar ideas diferentes por miedo a fallar o por evitar salir de la zona de confort. En HPCD han tomado la decisión de creer; eso merece mi total admiración y respeto.
–¿Puede indicarnos una película o libro que recomendaría a los estudiantes de Derecho?
–Como libro recomendaría La otra cara del Deporte, de Rafael Chavero. Considero que hay dos películas que todo estudiante universitario debe ver, independientemente de la carrera que estudie: Die Welle y The Last Castle.
–Si no fuese abogado, ¿cuál profesión hubiese escogido? ¿Por qué?
–Probablemente, de no ser abogado, habría estudiado Periodismo. Cuando se vive en un país con libertades limitadas, la información se convierte en un tesoro. Ser periodista es llevar ese tesoro a la gente y eso no tiene precio. Lo único que si tengo claro es que cualquier carrera la habría enfocado al deporte. Creo que el deporte es lo más lindo que tiene el mundo.
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