“Comencé mi carrera como abogada en Shearman luego de graduarme de la facultad de Derecho en 2007. En ese momento, mi objetivo era convertirme en la mejor abogada posible al aprender de algunos de los mejores en el área de mercados de capital, ¡pero nunca pensé que sería socia! Sin embargo, a medida que avanzaba mi carrera en la firma, no solo me vi desarrollando un conjunto de habilidades integrales que probablemente podría trascender a muchos otros campos más allá de la ley, sino que desarrollé un amor por la práctica y mis clientes que no ha disminuido”, relató Grissel Mercado, nueva socia de Shearman & Sterling.
La especialista aceptó responder nuestro Cuestionario LexLatin desde su nuevo cargo.
¿Por qué decidió convertirse en abogada?
Algunas de las razones por las que me hice abogado son porque quería una profesión en la que pudiera ayudar a otros, ser desafiada intelectualmente y al mismo tiempo tener la oportunidad de vivir dignamente. La profesión legal me ha permitido hacer las tres cosas.
Para cualquiera que esté pensando en la carrera legal, también creo sinceramente que la profesión le permite desarrollar un conjunto de habilidades que son fácilmente transferibles a muchas otras carreras y abre una gran cantidad de oportunidades.
¿Podría hablarnos sobre un objetivo a corto plazo?
Uno de mis objetivos a corto plazo más importantes es realizar una transición exitosa a mi nuevo puesto como socia. Planeo hacerlo al continuar prestando servicios de gran calidad a mis clientes, pero también aumentando mi presencia en la región participando en charlas, talleres y sesiones de capacitación.
¿Podría mencionar a un mentor que la haya ayudado a lograr sus objetivos profesionales o a un abogado que admire?
Aquí me gustaría destacar a mi mentora, Antonia Stolper. He estado trabajando con Antonia desde que era summer associate en Shearman & Sterling en 2006 y continuamente me han impresionado sus conocimientos de primer nivel y su increíble capacidad para dirigir y liderar equipos en transacciones. Ella es brillante y una excelente mentora para las mujeres, particularmente aquellas que, como yo, buscan hacer una carrera en América Latina. Tengo mucha suerte de haber aprendido directamente de ella.
¿Una película o un libro que le gustaría recomendar a estudiantes de Derecho?
Honestamente, hay muchos. Uno de mis favoritos es Matar a un ruiseñor. Simplemente me recuerda uno de los pilares fundamentales de la profesión legal que es utilizar nuestras habilidades para ayudar a los demás. Al final del día, el Derecho realmente puede ser una profesión noble.
Si no fuera abogada, ¿qué profesión hubiese elegido?
No puedo imaginar qué más podría haber sido. Después de haber estudiado en la Escuela de Servicio Diplomático de Georgetown, tal vez hubiera seguido una carrera en Relaciones Internacionales, pero una vez más, como abogado en Shearman & Sterling ¡creo que he adquirido un conjunto de habilidades que me ha permitido hacer un poco de todo!
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