En honor a Alfonso Rubio Arena

En honor a Alfonso Rubio Arena
En honor a Alfonso Rubio Arena
Fecha de publicación: 15/09/2017
Etiquetas:

Generoso, humilde, siempre accesible”, estas son algunas de las cualidades que recordarán amigos, socios y compañeros de Alfonso Rubio Arena, socio fundador de Rubio Leguía Normand, quien falleció a los 101 años de edad.

La firma peruana comentó a LexLatin que la mayor enseñanza profesional y personal que dejó el señor Rubio a sus compañeros y mentorados fue la premisa: “El compromiso con el Derecho y los clientes se renueva día a día, tratando de aprender algo nuevo en cada oportunidad”.

Los socios del bufete al que dedicara su sabiduría afirman que Rubio Arena “transmitió a los miembros del Estudio y otros profesionales la exigencia por la excelencia profesional, la ética como principal valor de la profesión y la responsabilidad de compartir experiencias y conocimiento con los jóvenes profesionales, todo puesto en beneficio de los clientes”.

Además de ser responsable de la modernización del código tributario peruano, Alfonso Rubio dejó otros aportes, entre ellos: Haber constituido, junto con otros diez abogados tributarios, el Instituto Peruano de Derecho Tributario (IPDT), institución que agrupa abogados de esa especialidad y persigue el estudio y el mejoramiento de la legislación tributaria nacional, y también fundar el Grupo Peruano de la Asociación Fiscal Internacional (IFA, por sus siglas en inglés), que promueve el estudio y promoción del derecho internacional y comparado con respecto a las finanzas públicas y, especialmente, del derecho fiscal internacional y comparado y de los aspectos financieros y económicos de la tributación.

Rubio Leguía Normand quiso compartir estas sentidas palabras de despedida:

“Hoy es un día muy triste para todos los que integramos el Estudio Rubio porque lamentamos el fallecimiento de nuestro más caracterizado socio fundador, el doctor Alfonso Rubio Arena,  principal impulsor de la creación de nuestro Estudio allá por el año 1980.

El doctor Rubio tuvo una trayectoria insigne durante sus 101 años de vida.  Hizo sus estudios escolares en el Colegio La Recoleta y sus estudios universitarios en la Universidad Católica.  En el año 1942 optó el grado de Bachiller en Derecho con la Tesis “La Herencia del Cónyuge” obteniendo el Grado de Abogado el 26 de noviembre de 1943.

Fue funcionario de la Dirección General de Contribuciones (hoy SUNAT) de la que se retiró cuando se desempeñaba como Procurador General. Fue profesor de Legislación Financiera de la Universidad Católica y fue Miembro del Consejo Superior de Contribuciones, de la Comisión para la Reforma de la Legislación Tributaria del entonces Ministerio de Hacienda e integrante de la Comisión Consultiva de este Ministerio y Vocal del Consejo Superior de Contribuciones (antecesor del actual Tribunal Fiscal). A su vez, fue Concejal de la Municipalidad de Lima, Presidente Honorario y Fundador del Instituto Peruano de Derecho Tributario-IPDT (1968-1970), miembro del Instituto Nacional de Derecho de Minería, Petróleo y Energía y  Presidente de la IFA (International Fiscal Association).

Fue director de numerosas empresas como Cementos Norte Pacasmayo, Schering Corporation, Mauricio Hochschild, Editora Andina (Diarios Expreso y Extra) y Presidente del Directorio del Banco Continental.

El doctor Rubio Arena estuvo especializado en Derecho Tributario, pero su ejercicio profesional abarcaba también las Áreas del Derecho Corporativo, Contractual y Minero.

Su experiencia, sagacidad y lucidez fueron un baluarte de nuestro Estudio. El doctor Rubio concurrió diariamente al Estudio hasta la avanzada edad de 100 años y siempre mantuvo un juicio lúcido y un consejo certero que iluminaba a todos quienes recibíamos sus sabias enseñanzas. 

En los primeros años de nuestro Estudio tuvimos un debate en una reunión de socios respecto de un cliente que ofrecía un importante honorario a cambio de representarlo en una operación que si bien era perfectamente legal, dejaba el sinsabor de no ser del todo correcta.  El doctor Rubio tomó la palabra e indicó que si bien el honorario era tentador, diseñar el esquema que el cliente pretendía no se ajustaba a los criterios éticos que el Estudio postulaba. Y agregó que se sentía tan  orgulloso de los asuntos que había ganado como de los que había dejado pasar por considerarlos reprobables. Sus palabras fueron definitorias y el Estudio declinó de brindar esa asesoría.

El doctor Rubio creía en el trabajo esforzado, en la pasión por el servicio eficiente y sobre todo en la primacía de los valores éticos en el ejercicio profesional.

Esos valores son los que han caracterizado al Estudio Rubio y de ahí que mantendremos vivo el recuerdo del doctor Alfonso Rubio Arena porque nuestro quehacer diario continuará ajustándose a los principios y preceptos que el doctor Rubio nos supo inculcar.

Descanse en paz, querido doctor”.

Desde LexLatin queremos extender nuestras más sinceras condolencias.  

WordPress ID
19109

Add new comment

HTML Restringido

  • Allowed HTML tags: <a href hreflang> <em> <strong> <cite> <blockquote cite> <code> <ul type> <ol start type> <li> <dl> <dt> <dd> <h2 id> <h3 id> <h4 id> <h5 id> <h6 id>
  • Lines and paragraphs break automatically.
  • Web page addresses and email addresses turn into links automatically.